En marzo de 1959, el joven y extraordinario jugador de ajedrez que respondía por el nombre cariñoso de Misha Tal se sintió muy triste al ser derrotado por un veterano maestro que le dijo para consolarlo: “no te preocupes Misha, yo también le gané a Botvinnik y al poco tiempo se convirtió en campeón mundial”. Pero este maestro no solo tuvo la sapiencia ajedrecística para vencer a Tal y a Botvinnik, también logró que inclinaran su rey otros campeones mundiales como Alekhine, Smyslov y Petrosian. Por si esto no fuera suficiente para calibrar su altísimo nivel, Vladas Ivánovich Mikenas, que así se llamaba esta histórica figura del juego-ciencia, también le dio jaque mate a Bogolyubow, Vidmar, Flohr, Bronstein y Keres, por solo nombrar otro selecto quinteto de quienes fueron candidatos al máximo título del ajedrez mundial.
Con Paul Keres tuvo una relación muy cercana, ya fuera por su común lengua ugrofinesa y por el gusto cómplice por los mágicos escaques, fue su analista, su mentor y su amigo. Como analista y mentor le colaboró en la época en la cual Keres venció a Botvinnik y se convirtió nuevamente a fines de los cincuenta, en # 2 del mundo tras Smyslov. Ya había sido segundo en el ranking orbital con Alekhine de número 1 en 1943, con Botvinnik en 1946 y más tarde lo seria de Tal en 1959. Mikenas fue colega y amigo de Keres desde que se conocieron en unas simultáneas en 1930, cuando el jovencito Paul de solo 13 años le ganó. Pasaron algunos años y Mikenas se enfrentó a Keres en la Olimpiada no oficial de 1936 en Múnich. Ese día, el maestro húngaro Géza Maroczy se acercó a la mesa antes de la partida y dijo: "He escuchado, maestro Keres, que su oponente de hoy le dio lecciones de ajedrez en el pasado". "Sí, ¡pero me alegra no haber aprendido nada de él!", contestó Keres, y los tres compartieron risas. Sin embargo, Mikenas logró ganar la partida y luego le preguntó a Keres en tono de broma: "Entonces, Paul, ¿fue esta una buena lección?" "Espero que sea tu primera y última victoria contra mí", respondió Keres.
Mikenas, como todos los grandes artistas del ajedrez, tiene maravillosas obras de arte, producciones de estética excepcional. En primer lugar, mencionemos su partida inmortal: la jugó vs Sergey Lebedev en el Campeonato de Georgia en 1941, donde jugó como invitado especial. Una partida de ajedrez se convierte en arte cuando sus jugadas constituyen secuencias originales y únicas. No simples repeticiones de secuencias lógicas coherentes con la posición realizadas muchas veces. Para ser arte clásico, deben ser, extraordinarias jugadas en posiciones irrepetibles. Pensemos en la Inmortal Polaca de Najdorf. Revivamos la siempreviva de Andersen. Maravillémonos nuevamente con la partida de Edward Lasker vs George Thomas, 1912. Con las preciosas joyas de Tal. Las de Bobby Fischer contra los hermanos Byrne. La inmortal del Zugswang de Nimzovich, o, las más recientes y poco conocidas como la de M. Hennigan vs R. Berzinsh en 2009 y J. Zhao vs D. Xiu, en 2011. La partida Mikenas vs Lebedev, está sin lugar a duda en el Topos Uranus del arte ajedrecístico, en un nicho especial con las mencionadas.
Algunas partidas de Mikenas:
Maestro Nacional de la Federación Colombiana de Ajedrez. Autor del libro Ajedrez Magistral Colombiano. Profesor de la Universidad del Atlántico
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