Mucho se ha hablado en Colombia acerca de la buena actuación de Antioquia en los pasados Juegos Nacionales Deportivos en Ajedrez, y de sus 12 medallas alcanzadas: 4 de oro, 6 de plata y 2 de bronce, balance que le permitió al equipo antioqueño alzarse con el primer puesto en la tabla general, siendo realmente un resultado histórico para nuestro departamento. En esta ocasión tuve la fortuna de ser el delegado del equipo, gracias a la confianza que me brindaron todos sus integrantes, quienes, más que compañeros, son mi familia, ya que existe una amistad de hace más de 15 años. A continuación, quiero exponer algunos factores de nuestra preparación, que podrían aportar al desarrollo del entrenamiento del ajedrez en Colombia, aclarando que solo es una propuesta y que muchos puntos acá tratados deben ser objeto de una detallada investigación científica.
El magnífico desempeño de los deportistas de Antioquia no es para nada cuestión del azar; es el resultado de varios aspectos que aportaron a que el equipo estuviera en su mejor momento, siendo la preparación ajedrecística el de mayor importancia: entrenamiento duro y constante durante 3 años, 12 meses al año, 7 días a la semana, dos sesiones al día, con un promedio de 8 horas diarias de trabajo, concentraciones, fogueo en torneos organizados por la Liga de Ajedrez de Antioquia, eventos nacionales e internacionales y la dirección de los entrenadores Carlo Vittorino y Jorge Mario Clavijo, quienes son, para mí, dos de los grandes preparadores de nuestro país.
Otro factor importante fue la gestión de INDEPORTES Antioquia, entidad que lo hizo todo para que estuviéramos en las mejores condiciones posibles en cuanto a alojamiento y alimentación, además de poner a nuestra disposición un completo grupo interdisciplinario conformado por médico, fisioterapeuta, masajista, nutricionista, psicólogo y demás personal logístico necesario. Pienso que este tipo de ventajas no dependen de nosotros como equipo de ajedrez, ni tampoco de decisiones de federación; dependen solo de la buena gestión y planificación de dirigentes de los departamentos y las ligas.
Aparte de lo ajedrecístico, quiero analizar otros aspectos importantes que posibilitaron los buenos resultados en competencia, pues creo que poco se tienen en cuenta en nuestra cultura y pienso que tenemos que empezar a investigar en ellos. Los dividiré en dos grupos principales:
1. Aspectos físicos
Antes de los juegos
Desde que comenzó el proceso para juegos nacionales, 3 años atrás, los entrenadores fueron muy conscientes de la importancia de incluir la actividad física en el proceso de entrenamiento, y para ello se realizaron unos test físicos en las instalaciones de la Liga de Atletismo de Antioquia, donde el licenciado en educación física, y entrenador del grupo masculino, Jorge Mario Clavijo, evaluó la resistencia de sus deportistas, dando como resultado que la mayoría no estaba en las mejores condiciones. Luego, se hicieron propuestas respecto a cómo mejorar la condición física de los integrantes del equipo. Cada uno de ellos escogió uno o más deportes que fueran de su agrado, lo que se conoce como deporte alterno, y de la mano de INDEPORTES se pudo contar con los espacios en otras ligas. Deportes como natación, tenis de campo, atletismo y fútbol, fueron los preferidos por nuestra selección masculina. Estos, se practicaban como mínimo tres días a la semana, en un promedio de hora y media diaria. En el caso de las mujeres, predominó el atletismo, impulsado por el entrenador Carlo Vittorino, quien motivaba a sus deportistas a pegarse la trotadita y, en algunos casos, a participar en carreras atléticas. El entrenamiento funcional, los aeróbicos y la práctica en los gimnasios también estuvieron presentes en la preparación de este equipo.
Todos hemos escuchado, en algún momento, sobre la importancia de realizar actividad física debido a los beneficios fisiológicos que propicia, como mantenerse saludable, mejorar la resistencia, fortalecer los músculos posturales, entre otros. Esta también trae beneficios emocionales, como proporcionar al deportista una sensación de bienestar, la prevención del insomnio y la disminución de los niveles de estrés y ansiedad. A ellos se unen beneficios sociales, como estimular el trabajo en grupo y fomentar el compañerismo, estos últimos evidentes en nuestra selección.
Durante los juegos
Alimentación
Los nutricionistas de INDEPORTES programaron una ingesta de cinco comidas al día, basadaen una dieta balanceada, donde se distribuyeron con detalle grasas, proteínas y carbohidratos, además de la inclusión de variados grupos de frutas y verduras. Ningún deportistaestaba autorizado para comerse ni siquiera un helado por fuera de la dieta planeada, pues se correría un alto riesgo de contraer alguna patología de tipo digestivo, lo que tuvo como resultado que ningún deportista de nuestra delegación sufriera alguno de estos inconvenientes.
Hidratación
La hidratación fue fundamental para el desempeño en altas temperaturas, ya que, como es sabido, el cuerpo humano está compuesto aproximadamente en un 65% por agua, y que constantemente debe estar consumiendo este líquido vital. Por esta razón, el agua que se le suministró a los deportistas fue escogida con detalle; se llevaron a los laboratorios de Medellín muestras de algunas marcas de agua vendidas en el Chocó, de buena apariencia y bien empacadas, pero, para sorpresa de todos, en los resultados de los análisis salieron no aptas para el consumo humano, así que solo se utilizaron marcas reconocidas y certificadas por el ICONTEC. A cada deportista se le entregaron diariamente cinco botellas de agua, pues bien sabemos que no solo debemos hidratarnos cuando tengamos sed, pues la sed y el hambre son los últimos llamados de emergencia de nuestro organismo cuando algo está fallando y no debemos esperar a que ello ocurra. En el caso de estos juegos nacionales, muchos deportistas de otras regiones sufrieron enfermedades relacionados con deshidratación, afectando de esta manera su rendimiento. Este suceso es algo lamentable, y piensoque se debería tomar cartas en el asunto para controlar episodios como estos en próximoseventos.
Descanso
Para afrontar jornadas tan fatigantes como son las competencias en los juegos nacionales, es necesario descansar lo mejor que se pueda, con el fin de tener buenas reservas energéticas hasta el final del evento. Nuestros deportistas descansaron mínimo ocho horas cada noche, y para ello se programó ir a dormir antes de las 10 de la noche. Para asegurarme de esto, pasé todos los días a las 9 de la noche recogiendo todos los dispositivos electrónicos que pudieran retardar el sueño, puesto que, por muy disciplinados que seamos, no falta la pareja sentimental, padre de familia o amigo que nos tiente a responder un mensaje de texto. Como las competencias eran a doble jornada, fue necesario un descanso al mediodía. Así, concentrarse en la habitación fue fundamental, pero siempre teniendo cuidado de evitar dormir demasiado, sólo media hora aproximadamente, dormir más de este tiempo nos puedría llevar a un estado de sueño profundo, y cuando esto sucede es difícil recuperar al deportista para la siguiente ronda y muy probablemente estaría de mal humor, caso que también sucede cuando un compañero te despierta bruscamente. Por ello se recomendó a
todo el grupo no utilizar este tipo de bromas.
Actividades de mantenimiento
Con el objetivo de prevenir molestias relacionadas con la contracción muscular (espasmosmusculares) causadas por largas jornadas de competencia, y crear una sensación de bienestar general en cada uno de los deportistas, se realizaron sesiones grupales de calentamiento y estiramiento antes de las partidas, algo raro en el mundo del ajedrez, pues, pocas veces vemos a un equipo de ajedrecistas dando semejante espectáculo, pero que, en este caso, tuvo la participación de toda nuestra delegación, que mostró buena disposición e interés en la actividad. La implementación del estiramiento en el ajedrez me ha reportado resultados bastante interesantes en los últimos años, y como lo he venido exponiendo en los diferentes eventos académicos programados por la Federación Colombiana de Ajedrez y la Asociación Nacional de Ajedrez Escolar, no creo que esté de más poner en práctica cualquier ayuda extra que nos permita el mayor rendimiento posible de nuestros deportistas.
Prevención de enfermedades
Para evitar cualquier tipo de complicación relacionada con la aparición de enfermedades en los deportistas de nuestra delegación, se estuvo muy pendiente de la aparición de cualquier síntoma y, en varias ocasiones, a la primera señal de alarma, por muy insignificante que pareciera, nos dirigíamos lo más rápido posible a la atención de un especialista. A veces puede uno parecer un poco intenso y exagerado con el tema, pero, como dice el conocido refrán, ¡más vale prevenir que lamentar!
2. Aspectos Psicológicos
Ambiente grupal
Se tendría que realizar una investigación histórica de todos los equipos que han conformado la selección Antioquia, desde que se comenzó a participar en los juegos nacionales, para determinar si este es, o no el, mejor equipo de trabajo; lo que sí puedo decir es que en la selección que envió Antioquia a estos juegos, predominaron las buenas relaciones entre cada uno de sus integrantes, conocidos de toda la vida, compañeros de alegrías y tristezas desde niños, comandados por entrenadores que cada uno de nosotros consideramos como nuestros padres, quienes nos han formado tanto ajedrecística como personalmente. Es, definitivamente, el mejor equipo que pudo conformarse con miras a esta participación. Quizás había otros deportistas de buen nivel quienes también pudieron lograr buenos resultados, pero, para mi punto de vista, la conformación de este equipo no tuvo peros. Tanto los titulares, como los suplentes, unieron fuerzas sin ningún tipo de egoísmos, para que Antioquia sobresaliera. Digo esto porque en la historia del deporte universal son comunes los casos donde los suplentes, en su afán de sobresalir, generan un mal ambiente en el equipo, hablando mal del rendimiento de sus compañeros, haciendo énfasis en que ellos podrían hacerlo mejor que los titulares y creando división entre los integrantes del grupo. Pero, orgullosamente, puedo decir que este no fue el caso. La postura de los suplentes de nuestra selección fue proactiva, aportando a la preparación teórica de sus compañeros, motivando a los buenos resultados, sirviendo en la logística diseñada para la obtención de altos logros y estando atentos a cualquier llamado de los entrenadores para ser parte de la competencia.
Otros momentos destacados en el ambiente grupal fueron las ruedas de positivismo antes de las partidas, donde todos los integrantes nos abrazábamos formando un círculo, cualquiera tomaba la palabra para decir frases de aliento a sus compañeros y se terminaba por la unión de nuestros brazos en el centro, culminando el ritual con un grito enérgico de ¡Antioquia, Antioquia!, algo bastante curioso y poco esperado en el mundo del ajedrez, puesto que somos un deporte más bien silencioso. Como dato curioso está que todos los integrantes del equipo de ajedrez masculino, y el delegado, asistimos conjuntamente a la barbería un día antes del viaje a juegos Nacionales a realizarnos un corte de cabello semejante, lo más corto posible, con el objetivo de demostrar nuestro sacrificio por el equipo… y, bueno, también para afrontar el calor extremo de la ciudad de Quibdó.
El sentido de pertenencia por nuestro departamento y por nuestro equipo fueron el pan de cada día durante la permanencia en el departamento del Chocó. Todo el tiempo portamos orgullosos el uniforme de Antioquia, vestuario que, por cierto, fue muy bonito y fresco, garantizándonos así mantener una adecuada temperatura corporal, algo muy importante en esas cálidas y húmedas tierras.
El estado de ánimo estuvo todo el tiempo por lo alto, al levantarnos, y antes de las competencias, se entonaba a todo pulmón La Chaua, himno de batalla de todas las selecciones deportivas de Antioquia desde hace ya varias décadas, himno que también hizo su aparición en las premiaciones, donde lo individual se hizo a un lado para darle paso al sentimiento y orgullo grupal por haber dejado en alto los colores de un departamento que nos brindó su apoyo. Además de ello, fuimos resaltados por personal de apoyo de INDEPORTES Antioquia como uno de los equipos más unidos, hasta para comer estábamos siempre juntos, y por muy pequeña que fuera la mesa, todos teníamos un lugar en ella, logrando así que cada deportista se sintiera un eslabón más de esta poderosa maquinaria deportiva que se llamó Selección Antioquia de Ajedrez.
Refuerzos positivos
En muchos casos, una palabra mal dicha, en un momento poco adecuado, puede bajarte el ánimo, causarte miedos innecesarios o elevar tu estado de ansiedad. En el caso del ajedrez, acercarse a un deportista, y decirle una frase fuera de lugar después de terminada una partida, podría causarle un estado de inseguridad, indisponerlo emocionalmente y, en el algunos casos, podría ser muy difícil recuperarlo al cien por ciento para la siguiente ronda, más aún si comienza en pocos minutos, como es el caso de las partidas rápidas, que son programadas una tras otra. La verdad es que nadie quiere perder una partida, y dejar pasar un movimiento sencillo en una competencia de alto nivel no es algo causado por la falta de preparación técnica, sino por la aparición de factores psicológicos inherentes a las justas deportivas Frases como: Era mate en dos, Cómo no vas a ver esa jugada, "eso lo vimos todo el tiempo", o comentarios menos positivos, como "Qué decepción", o "vos si sos marrano", que son bastante recurrentes entre compañeros de equipo, y que en su mayoría de veces son expresadas en forma de charla, pero si se dicen reiterativamente pueden llegar a generar un problema de inseguridad a cualquier deportista.
Por todo lo anterior, se recomendó a los deportistas de nuestra selección no incurrir en este tipo de comentarios, haciéndoles énfasis en la frase Nada de comentarios negativos, la cual fue seguida al pie de la letra por todo el equipo. Se acordó que solo se harían refuerzos positivos, resaltando las buenas decisiones tomadas en el tablero, y que cada que fuera posible se motivaría a los compañeros recordándoles los logros alcanzados hasta el momento.
Otras herramientas de apoyo psicológico
Para nuestra fortuna, contamos con el apoyo de un excelente psicólogo deportivo que estuvo acompañándonos durante el tiempo que duraron los juegos nacionales, quien nos hizo énfasis en las técnicas de respiración, que tienen como objetivo el control de la ansiedad durante las partidas. También utilizó charlas individuales antes de las competencias, las cuales son muy importantes en la puesta a punto de algunos deportistas, que necesitan un especialista para sentirse más cómodos a la hora de expresar sus inquietudes antes de una partida importante.
Otra de las herramientas interesantes fueron los rompecabezas o juegos de estrategia diferentes al ajedrez, los cuales fueron utilizados por nuestros deportistas, entre partidas de blitz, con el fin de bajar un poco la intensidad de la tensión por la competencia. Terminada cada partida, todos los atletas se dirigían a un lugar de concentración, donde los esperábamos los demás integrantes del equipo para manifestarles nuestro apoyo grupal y para que el psicólogo les suministrara todas sus herramientas de trabajo. Es importante resaltar la necesidad de aislar a los deportistas lo más rápidamente posible del público y de los corrillos de pasillo mientras se encuentren en una competencia (sobre todo las de los ritmos de juego rápido), pues esto puede desconcentrarlos de lo ajedrecístico y además, como no podemos controlar todos los refuerzos negativos que puedan llegar de un sinnúmero de personas presentes, es mejor tenerlos agrupados en un buen espacio de reposo. Este debe tener buena ventilación y ser cómodo para el descanso, pero, en caso tal de que no se cuente con una de estas características, por lo menos se debe buscar un espacio en el cual los deportistas se sientan tranquilos y alejados de las personas ajenas a la delegación.
La puesta a punto
En el entrenamiento deportivo, la puesta a punto se define como el momento previo a la participación en una competencia (periodos precompetitivos y competitivos en la planeación del entrenamiento). Tiene como objetivo principal que el deportista llegue a la competencia en la cima de su curva de rendimiento, tanto en su nivel ajedrecístico como físico y psicológico. Estas últimas instancias previas a la competencia deben planificarse con detalle, si lo dejamos al azar, podríamos llevarnos sorpresas muy desagradables. Es cierto que algunas variables no se pueden controlar por completo, pero entre más factores tengamos bajo nuestro control, será mucho mejor. Nada nos ganamos con invertir tiempo y dinero en la preparación de nuestros equipo, enviarlos a otros países a competir contra la élite o asignarles un gran maestro de entrenador, si a la hora de las competencias fundamentales el atleta se enferma o no logra su mayor rendimiento a causa del miedo, la ansiedad u otros factores ajenos a lo ajedrecístico.
Todos sabemos que muchos de los ajedrecistas llamados a ser protagonistas en los pasados juegos nacionales no estuvieron ni cerca del nivel que les hemos conocido en otros eventos. Escuchamos comentarios como, este no fue mi torneo, Tuve muy mala suerte y me enfermé, no sé qué me paso, A principio del año estaba jugando mejor. No creo que el bajo rendimiento obedezca al trabajo de sus entrenadores, pues, en mi opinión, son bastante competentes. Pienso que la mayoría de estos casos se pudieron haber evitado si se hubiese tenido más en cuenta los demás factores que juegan paralelamente a lo puramente ajedrecístico.
Conclusiones
Ya que este fenómeno nos ocurre en muchos eventos, tanto nacionales como internacionales, donde nos queda la duda de por qué nuestros deportistas no compiten al nivel que muestran en los entrenamientos o que se les conoce en competencias locales, dejándonos con la incertidumbre de si las cosas se pueden estar haciendo mejor, opino que los entes deportivos (clubes, ligas, federaciones) y entrenadores podríamos adoptar algunas de las siguientes ideas:
Crear una carpeta por deportista, que contenga fichas de seguimiento donde, de manera práctica, se almacene información sobre la salud física (historia clínica, vacunas, factores de fatiga, alimentos a los que es alérgico, etc.) y de la salud psicológica (miedos, factores socio-económicos, ansiedad, elementos que interrumpan su descanso, etc). Con esta información podríamos crear mejores estrategias logísticas para el bienestar de cada uno de ellos.
Estandarizar una batería de ejercicios físicos (calentamiento y estiramiento), psicológicos(control de la ansiedad), y ajedrecísticos, que nos permitan llegar en la mejor forma posible a cada una de las partidas.
Crear un formato de hábitos saludables, que cada uno de los deportistas siga al pie de la letra mientras se encuentre en competencia.
Masificar los procesos de capacitación por todo el país, con especialistas en cada una de las ciencias que puedan aportar a la formación de todas las personas que tengan que ver con la preparación de nuestras selecciones (entrenadores, padres de familia, dirigentes, delegados).
Seguir haciendo lo posible para que nuestras selecciones cuenten con un grupo interdisciplinario de apoyo, que los acompañen tanto en la preparación como en las competencias.
Incluir en los estatutos de las ligas y clubes deportivos, políticas de prevención de la enfermedad y promoción de la salud que se encarguen de velar por el cumplimiento de estas iniciativas, pero además de ello debemos estimular la participación de nuestros deportistas en tales actividades.
Crear alianzas con instituciones de educación superior, que nos faciliten, por lo menos, practicantes de las diferentes áreas relacionadas con la salud, para que se encarguen de todo lo relacionado con el bienestar de nuestros atletas.