Continúa la fuga de ajedrecistas rusos de talento al extranjero. Maxim Chigaev, que era muy fuerte en las categorías inferiores, se convirtió en el siguiente en la lista de los que cambiaron su nacionalidad deportiva. A partir de ahora representa a España.

En el segundo centenar
La información sobre la transición de Chigaev apareció en la página web de la Federación Internacional de Ajedrez (FIDE). En su perfil aparece ahora la bandera española. No se especifica cuándo exactamente Maxim hizo el cambio de nacionalidad.

Ahora el ex ruso ocupa el puesto 154 en la clasificación estándar de la FIDE con 2.616 puntos. En Rápidas tiene 2.592 puntos, y en Blitz - 2.561.

A juzgar por estos resultados, es difícil decir que la marcha de Chigaev ha sido una pérdida. Pero el tipo prometía mucho en su juventud.

Crecer y perder
Maxim Chigaev, natural de Kemerovo, aprendió a jugar al ajedrez gracias a su abuelo. Tras una semana de clases, el chico fue llevado al club de la Universidad Estatal de Kemerovo, donde trabajaban los entrenadores Evgeny e Inga Andreev. Así fue como el joven siberiano empezó a jugar al ajedrez profesionalmente.

De niño, Chigaev no conocía iguales, y ganaba regularmente competiciones entre sus compañeros. A los 14 años, el adolescente se trasladó de Kemerovo a San Petersburgo, donde los Grandes Maestros Denis Evseev y Valery Popov se ocuparon de su desarrollo profesional. Incluso el ex campeón del mundo Alexander Khalifman dio clases a Maxim.

El chico resultó ser un alumno capaz. Como miembro del equipo nacional ruso, ganó la Olimpiada Mundial Júnior, en la que sus compañeros de equipo fueron Vladislav Artemyev, Yuri Eliseev, Darsen Sanzhaev y Maxim Vavulin. Chigaev fue tercero en la prueba individual de los Campeonatos del Mundo Júnior. El chico era famoso por sus habilidades en el juego rápido, teniendo una puntuación récord en Rapid - 2727.

En 2019, Maxim participó en la Copa del Mundo, pero en la primera ronda perdió en dos partidas contra el iraní Parham Magsoudlou. Habiendo crecido, el siberiano se ha encogido en altura y ha perdido puestos de liderazgo en la escena internacional. Al mismo tiempo, Chigaev siguió siendo uno de los mejores a nivel nacional ruso, ganando y obteniendo premios en diversos torneos.

No se queda quieto
En la biografía de Chigaev hay un dato interesante. A los 26 años, el ajedrecista había cambiado cinco veces de lugar de residencia.

De su Kemerovo natal se trasladó a San Petersburgo, pero no vivió allí mucho tiempo. Tras graduarse en la escuela, Maxim fue a Ekaterimburgo e ingresó en la Universidad de Minas local, famosa por sus tradiciones ajedrecísticas. Después de la boda, Chigaev y su esposa Anastasia Sazonova se fueron a Tyumen, donde popularizaron activamente el juego. Y ahora España ha aparecido en la carrera del gran maestro.

Tal vez el traslado al suroeste de Europa tenga un efecto positivo en su juego. Pero hasta ahora no podemos decir que su carrera internacional adulta haya sido un éxito. Ahora Maxim tiene la oportunidad de reiniciarla.