En el capítulo de hoy: a Gallego le dicen "pero entonces, ¿usted qué se va a poner a hacer? ¿A dar clases de ajedrez?"
Esta foto, junto con mi entrenador de entonces Faiber Lotero, fue tomada tres meses después de tomar una decisión dura para mi vida: rechacé una propuesta para seguir ejerciendo mi carrera de Ingeniero de Sistemas, cuando la encargada de Recursos Humanos de la empresa donde me encontraba me planteó la posibilidad de continuar allí.
Yo, con la terquedad que me caracteriza, me incliné por mi pasión aunque fuera el camino menos claro para alcanzar la estabilidad económica y una vida tranquila. Ella no ocultó su sorpresa cuando le expuse que quería poner todo de mí, exclusivamente en el ajedrez durante dos años y ver qué pasaba. Una apuesta arriesgada, pero coherente con mi sentir.
A la expresión facial, que ya hablaba por sí misma, le agregó el siguiente interrogante: "pero entonces, ¿usted qué se va a poner a hacer? ¿A dar clases de ajedrez?" Una inquietud entre la sinceridad y la incredulidad en que ese camino me ofreciera alguna posibilidad de éxito.
El día de esta foto del recuerdo, en 2016, Faiber y yo definimos el plan de entrenamiento de los siguientes meses y cuáles torneos jugaría en ese tiempo. Una ruta que podría conducirme al éxito o al abismo.
¿Qué diría ella si supiera que a eso, a dar clases de ajedrez me dedico hace 4 años acá en Hong Kong y que me va mejor que ejerciendo la Ingeniería? Al Andrés de esa época pasada, con más angustias que certezas, también le sorprendería ver todo lo que ha pasado en estos años.
PD: a los dos años de esta foto alcancé el título de GM.