Ashwath Kaushik, un niño indio de ocho años originario de Singapur, sorprendió el domingo al gran maestro polaco de ajedrez Jacek Stopa en el Abierto de Burgdorfer Stadthaus. Con esta hazaña, se convirtió en el jugador más joven en vencer a un gran maestro en la versión clásica del juego.
El récord anterior lo ostentaba el serbio Leonid Ivanovic, también de 8 años pero varios meses mayor que Kaushik, que venció al gran maestro búlgaro Milko Popchev, de 60 años, en el Abierto de Belgrado hace casi una semana.
Según un reportaje de Channel News Asia, Kaushik, que representaba a Singapur, derrotó a Stopa, que a sus 37 años es casi cinco veces mayor que él.
"Me siento orgulloso de mi juego y de cómo he jugado, sobre todo porque en un momento dado estuve peor, pero conseguí remontar", declaró Kaushik, número 37.338 del mundo en la clasificación de la FIDE.
Al final, Kaushik terminó el torneo en 12ª posición tras perder contra Harry Grieve y ganará 84 puntos de rating en la próxima lista, según Chess.com.
Kaushik nació en la India, pero vive en Singapur desde hace 6 años. La primera vez que saltó a la palestra fue cuando ganó el triple oro en la categoría sub-8 del Campeonato Juvenil de Asia Oriental en 2022, cuando sólo tenía 6 años.
Ese mismo año también se proclamó campeón del mundo de rápidas sub-8, cuando aún le faltaban dos años para alcanzar el límite de edad.
Según Chess.com, el niño de 8 años dedica hasta siete horas diarias al ajedrez y resuelve miles de rompecabezas en su antiguo programa de ajedrez. Su padre, Kaushik Sriram, también reveló que su hijo tiene memoria fotográfica: "Resuelve visualmente largos y complejos rompecabezas". Hace poco terminó toda la serie Grandmaster del GM Jacob Aagaard sin usar tablero".
El gran maestro singapurense y director general de la Federación de Ajedrez de Singapur, Kevin Goh, alabó la hazaña de Ashwath en "X": "Papá es un gran apoyo, el chico es aplicado, la escuela le permite flexibilidad y, por supuesto, tiene un talento natural".
"Queda por ver hasta dónde puede llegar, ya que sus intereses pueden cambiar a medida que crece. Aun así, tenemos esperanzas". Goh también bromeó diciendo que, como sólo tiene ocho años, Ashwath todavía "necesita un cojín elevador para llegar al otro lado del tablero".
También atribuyó el éxito de Ashwath a los "muchos otros entrenadores y seguidores" de su trayectoria.